viernes, 27 de mayo de 2011

Simpatía

Para tornarnos mujeres agradables tenemos que aprender a lidiar con nosotras mismas, para ser humilde tenemos que aprender de Dios y para ser simpática hay que aprender el trato con las personas. La mujer de Dios busca  ser simpática no para ser popular o apreciada por todos, pero si porque tiene el propósito de glorificar a Dios en su vida.

La simpatía es aquella sonrisa natural y sincera que hay en el rostro de la mujer de Dios, es su saludo cuando llega en algún lugar, es la atención que brinda a las personas, ella sabe que no esta solita en el mundo. Y ella entiende que hay otras personas allí que no la conocen y muy probablemente se van a guiar por la primera impresión que ella deja. 
Hay personas que ya nacieron simpáticas y otras aprendemos con las experiencias cotidianas. 

Quizás usted ya tuvo la experiencia de creer que alguien era muy desagradable, que era orgullosa y cuando la conoció pudo ver que estaba equivocada a su respecto, seguramente eso paso por el hecho de que esta persona no era muy simpática y por eso no dejo una buena primera impresión.
Si usted ya vivió esta experiencia entonces también ya habrá vivido lo contrario, creer que una persona era muy buena y cuando la conoció de verdad constato que no era cierto, seguramente eso paso porque ella aprendió las actitudes correctas que debe tomar para ser acepta por las personas pero en su interior no había sinceridad...
Por eso sobre todas las cosas esta la sinceridad, con uno mismo, con Dios y con las personas.

Si usted percibe que la gente le dice: "yo tenia otra opinión de vos" quizás usted deba considerar la idea de aprender como ser más simpática con las personas, verifique si usted las saluda, si les sonreí, si es amable cuando les habla, estas pequeñas actitudes cambian completamente su image. O busque el ejemplo positivo de alguien que usted conozca y trate de aprender con esta persona. 

Haga todo lo posible para demostrar Quien usted lleva adentro.
La presencia del Señor Jesus es tan agradable, simpática y humilde que es imposible ignorar. De igual forma es la mujer que Lo lleva adentro suyo.