lunes, 2 de mayo de 2011


El tema que venció la encuesta: La Obra de Dios


El que tuvo un encuentro con Dios, recibió Su Santo Espíritu empieza una caminata, mientras caminamos el deseo de servir a Dios es algo que nace naturalmente en el corazón del que busca mantener su salvación.
Como en el cuerpo humano cada miembro tiene una función, en la obra de Dios es lo mismo.
Aunque no todos fueron llamados para ser obrero, pastor o esposa de pastor, todos pueden contribuir. Hay muchas formas de servir a Dios, uno puede ser joven o grande, tener mucho o poco tiempo de iglesia, saber mucho o poquito, no importa, porque hacer la obra es servir a su prójimo.

Yo creo que un requisito indispensable para que alguien pueda servir en la obra es ser SINCERO en su intención de agradar a Dios. Desafortunadamente hay personas que quieren mostrarse, quieren ser obrero para ejercer autoridad sobre otras personas o ser respetado por ellas. Quien tiene esta actitud muestra que no conoce a Dios, se engaña a si mismo. Es que en realidad servir es otra cosa, no tiene nada que ver con eso ¡y es muy sencillo!

Para que usted entienda que hacer la obra de Dios va mas allá de ponerse un uniforme vea que las actividades mas importantes son hechas afuera de la iglesia, como evangelizar en las calles, en los hospitales, visitar los que están apartados de la iglesia y etc. 

Las evangelizaciones que marcaron mi vida fueron hechas a personas hospitalizadas, por eso siempre que tengo la oportunidad, este es el trabajo que a mi más me gusta hacer. 
Usted sabe que cuando estamos enfermos nos debilitamos, nos ponemos sensibles, nos preocupamos por nuestra familia y los que dependen de nosotros. En  hospitales yo tuve la oportunidad y el privilegio de llevar la Salvación para personas que estaban esperando la muerte y luego después de hablarles y orar por ellas, entregando su vida a Jesus, ellas murieron. Por supuesto que me gustaría que se hubiesen sanado y vivido para dar su testimonio, pero al salir de ahí lo hice con satisfacción, segura de Dios les dio la oportunidad en la hora justa.
Por eso hoy me gustaría enfatizar este trabajo, de los hospitales, porque quien ya estuvo enfermo e internado sabe muy bien lo que es, la vida para, queda interrumpida. Aunque usted nunca haya estado ahí, ponga se en el lugar de estas personas, que están llenas de incertidumbres, de dolor, de preocupaciones, muchas sin saber cuando volverán a vivir, creo que es una de las peores cosas, sino la peor.

Proponga hacer por lo menos una visita al mes en hospitales, y al hacerlo no tenga lastima, no se impresione, no se emocione, la intención no es que usted se sienta bien al ver la miseria ajena, o consolado al ver que hay personas sufriendo mas que usted...
Cuando vaya evangelizar en el hospital, vaya vestido de fe. Piense que Dios puede llevar usted hacia personas que solo están esperando tener una oportunidad para salvarse porque ya están por morirse.

No pierda la oportunidad de visitar las personas de la iglesia cuando se enferman, yo he tenido el privilegio de hacerlo y la persona que recibe la visita siempre se queda tan contenta, de haber sabido eso antes no perdería ni una oportunidad de hacerlas sentirse un poquito mejor...


Mañana hablaremos sobre otras formas de hacer la obra de Dios, si usted no puede ir a hospitales verá que hay otras cosas tan importantes como esta que puede hacer.


Ahora quiero saber lo que piensa usted sobre eso. Deje su comentario...